Aun en la pandemia y del semáforo naranja que regresó a la zona de Fortín, las banquetas de los tianguis se observaron abarrotadas, con puestos ambulantes y sin controles sanitarios.
Desde muy temprano empieza la afluencia de comparadores en los seis tianguis, asimismo, donde más se vio afluencia de habitantes fue en las banquetas aledañas al bulevar Córdoba-Fortín, donde es común ver cada miércoles decenas de puestos de todos los productos, sin ningún control.
Aun a pesar de que el alcalde Antonio Mansur Oviedo prometió realizar medidas drásticas para retirar a los ambulantes de las calles, esto de acuerdo a la reunión sostenida con los representantes de los seis tianguis que se instalan cada miércoles.
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