Las boletas electorales que estarán listas en la próxima elección constitucional tienen al menos 10 candados de seguridad para volverlas infalsificables, lo que las vuelve incluso más seguras que los billetes.
En México hay pocas empresas destinadas a la elaboración de papelería electoral, entre las que destacan, los talleres gráficos de México, un organismo público descentralizado de la administración pública federal, donde tradicionalmente el Instituto Nacional Electoral imprime las boletas para la elección cada tres años.
Existe otra empresa contratada suele ser LSC Communications Ubicada en Tlalnepantla Estado de México y en donde habitualmente también se procede a la destrucción de las boletas una vez terminada la elección.
Tras la concurrencia de procesos electorales simultáneos en el país, talleres gráficos de México centraliza la impresión de boletas para el Instituto Nacional Electoral y considera algunas cuantas elecciones estatales.
Los elementos de seguridad con las que cuentan, destaca un papel especial diseñado para la impresión de la boleta, un talón con folio para cada distrito electoral, una franja desprendible, sellos de agua invisibles al ojo humano, fibras ópticas, hilillos de colores en su impresión y colores específicos y listado de candidatos al reverso, así como la impresión de los logotipos de los partidos políticos.