Durante la revisión de compras y gastos de los municipios, el Órgano de Fiscalización Superior ha sido deficiente y hasta ser un arma ejecutora para intimidar a alcaldes, al decirles que si no contratan a despachos contables a modo y recomendados desde el Congreso de Veracruz, habrá auditorías, crear desvíos de recursos y culpar por anomalías a las comunas edilicias. Pero si les pagas millones de pesos a despachos contables auditores recomendados por la propia titular del ORFIS, Dalia González Cobos y del diputado local Juan Javier Gómez Cazarín, así como del Secretario General del Congreso de Veracruz, Domingo Bahena Corbalá, habrá armonía y la no agresión.
Y en el municipio de Minatitlán, tal parece, no existen auditorías y extrañamente el ORFIS no molesta al alcalde Nicolás Reyes Álvarez… Desde su toma de protesta en el 2018, inician las anomalías, extrañas compras y cobros excesivos de despachos contables. Y quien comanda esta administración municipal es el hijo del alcalde, Agustín Reyes, el mismo, quien la propia titular del ORFIS afirma, que ella trata directamente con el hijo del presidente municipal en Minatitlán.
Realizando una investigación, la administración del Ayuntamiento de Minatitlán es una verdadera Estafa Maestra. Obras sin licitar, sin subir a Compranet, sin invitación a tres empresas cuando menos y un sinfín de anomalías administrativas. Su cómplice es la tesorera llamada Eunice Maldonado Ramírez y su piedra en el zapato, la síndica Gisela Pineda, pues ella ganó una medida cautelar por violencia de género, en contra del alcalde y el secretario del Ayuntamiento de Minatitlán, por el simple hecho de que la Síndica no le aprueba sus múltiples negocios de diezmos y corrupción. Y esto lo comprobamos con el Juicio para la Protección de los Derechos Político-Electorales del Ciudadano, con el Expediente: TEV-JDC-117/2021, en contra del alcalde Nicolás Reyes Álvarez y resolviendo por unanimidad concederle la razón a la Síndica Gisela Pineda Pérez.
El Júnior Agustín Reyes es el que mueve todo el criterio administrativo municipal y la Auditoría Superior de la Federación debe analizar todos sus movimientos financieros en el Ayuntamiento de Minatitlán, donde no hay licitaciones públicas, ni invitaciones, no suben la información a Compranet y es obvio, porque aparece otro socio de estas compras y contratos, como es el esposo de la Secretaria de Energía, Rocío Nahle García, de nombre José Luis Peña Peña, el responsable de hacer paquetes de obra o negociar con el despacho que los audita, sin pasar por la aprobación del Cabildo y teniendo a otros cómplices como Domingo Bahena Corbalá y Juan Javier Gómez Cazarín. Lo indignante, es que a ese despacho contable, cada año, le pagan 2 millones de pesos para ser intocables.
No se deberá omitir, que la empresa Consultores y Auditores DYG, teniendo negocios millonarios con Everardo Domínguez Landa, titular de Fiscalización del Congreso de Veracruz, es quien le lleva la auditoría en Minatitlán desde hace tres años, como se confirma en documentos contables oficiales y les urge, que la Síndica les firme la del 2021 para poder cobrar su cuarta factura de dos millones de pesos. Y con eso, las tranzas y robos del alcalde de Minatitlán con su hijo Agustín estarán perdonadas por la titular del ORFIS y se negoció con el líder de la Junta de Coordinación Política, Juan Javier Gómez Cazarín para tener, como él dice: “La bendición papal”.
Fuente: Periódico Veraz