El ayuntamiento de Coatzacoalcos utilizó los corredores del panteón Jardín para inhumar personas, por lo que dejó sin accesos a las tumbas para personas con alguna discapacidad; desde el año 2018, las autoridades morenistas tenían un diagnóstico de la falta de espacio y apenas en este año se autorizó la compra de un nuevo terreno.
De acuerdo con reportes ciudadanos, durante todo el año se han enterrado varias personas en los pasillos que estaban delimitados desde la construcción de este cementerio, el cual fue abierto a finales de los años ochenta.
El panteón Jardín fue proyectado para tener árboles, pasillos amplios para personas con discapacidad y áreas de descanso para que las familias pudieran acudir a visitar a sus familiares, sin aglomeraciones.
A principios de la administración municipal, la regidora con la comisión de Panteones, Eusebia Cortés Pérez, dio a conocer que la pasada administración municipal no les dejó los registros en los panteones, se vendieron espacios a precios exorbitantes y anunció una jornada para actualizar el padrón en los tres cementerios de la cabecera municipal.
Desde el 2018, ya advertían que no había suficientes espacios en los panteones y anunciaron que se iban a buscar las acciones legales para crear un nuevo cementerio. Un año después, refirió que la situación ya era critica y se había informado al cabildo pero seguían buscando un predio para poder hacer el nuevo panteón.
El 5 de febrero, tres años después del diagóstico que hicieron a los panteones, el Cabildo de Coatzacoalcos autorizó la compra de terreno para ampliar el panteón de Barrillas, contiguo a lo que será un panteón ministerial y las nuevas instalaciones del Servicio Médico Forense que construirá la Secretaría de Gobierno.
En el año 2020, cuando se inició el confinamiento por la pandemia del coronavirus, los municipios de Minatitlán y Cosoleacaque efectuaron adecuaciones y ampliaciones para enfrentar la posible demanda de espacios, en el caso de Coatzacoalcos solo se usaron los espacios que estaban disponibles y cuando se acabaron, comenzaron a inhumar en los pasillos.
Los funcionarios del ayuntamiento solo señalan que el municipio han donado esos espacios a la familias que tuvieron la urgencia de inhumar a sus familiares fallecidos por el covid-19 o por la violencia que azota la zona sur.
Por su parte, la regidora de Panteones, Eusebia Cortes Pérez ya se separó de su encargo para buscar la candidatura de Morena a la diputación local, dejando su encargo en panteones sin resolver.