La red social estadounidense conocida como Facebook, en colaboración con el FBI para dar con un acosador de menores, pagó 100 mil dólares a una empresa de ciberseguridad para hackear el perfil del presunto criminal.
El hombre que en redes sociales utilizaba el pseudónimo “Brian Kil”, fue identificado como Buster Hernández. Se descubrió que su modalidad consistía en amenazar a sus víctimas con tiroteos en sus escuelas a cambio de fotografías desnudos.
La forma en que Hernandez mantenía su anonimato era a través del software Tails, que es una distribución de Linux diseñado para preservar el anonimato, pues encripta todas las conexiones del implicado a través del navegador anónimo Tor.
Es la primera vez que la compañía estadounidense de Mark Zuckerberg toma acciones semejantes.
Con información de agencias
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