Alejandro Vargas Colorado, investigador del Instituto de Ingeniería y académico en el área de Comportamiento de Suelos y Vulnerabilidad Estructural, explicó que para que se provoque un tsunami se debe registrar un sismo de una magnitud muy grande.
“Para que se provoque un tsunami de esa magnitud es necesario que el sismo tenga una magnitud muy grande, no como los que se presentan aquí en la costa veracruzana”.
Aseveró que con el sismo de 4.9 que se registró este miércoles sí pudo haber un pequeño desplazamiento de agua, pero prácticamente imperceptible o que provocó olas que no pasaron de la playa.
EXCELSIOR
Categoria