Empresas constructoras veracruzanas permanecen en crisis; están sin contratos de obra por parte del gobierno y tampoco han adquirido los pagos de adeudos que se tienen desde hace ocho años.
Luego de lo antes mencionado, el presidente regional en Veracruz Puerto de la Asociación Nacional de la Industria de la Construcción, Francisco Germán Revilla, destacó que derivado de la pandemia del COVID-19, el 90 por ciento de las empresas han dejado de trabajar.
A esta situación se le suma que, a 700 empresas constructoras afiliadas a esta asociación, les deben alrededor de 300 millones de pesos desde las administraciones estatales de Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes Linares.
“Cerramos casi el 90 por ciento de las empresas constructoras, la obra pública es nula, y entramos a concursar, pero les asignan las obras a empresas foráneas; Les deben a 700 empresas del estado, alrededor de 300 millones de pesos, a lo mejor me quedo corto. Los adeudos vienen del sexenio anterior y del bienio anterior. Esperemos que paguen porque ese dinero estuvo en un presupuesto, no tendría por qué desaparecer ese dinero”, informo.
Tras de esta situación, el empresario informó que muchas empresas han decidido migrar a otros estados a laborar, como Tabasco, Chihuahua, Estado de México, en donde están buscando realizar obras de construcción del Banco del Bienestar de la mano de la SEDENA.