Los daños en puentes y carreteras y la falta de maquinaria pesada complicaban las labores de los rescatistas el lunes, luego de que lluvias torrenciales causaron varios desastres en islas remotas del este de Indonesia y en Timor Oriental.
Al menos 133 personas murieron y docenas estaban desaparecidas en Indonesia, y en Timor Oriental se informó de 27 decesos. Se espera que el ciclón tropical que provocó los daños siga afectando a los países del sureste asiático durante los próximos días en su avance hacia Australia.
Poco después de la medianoche del domingo, un alud de lodo cayó desde las colinas circundantes sobre docenas de casas en la aldea de Lamenele, en la isla indonesia de Adonara, en la provincia de Nusa Tenggara Oriental. Los rescatistas recuperaron 49 cuerpos y 28 personas sufrieron heridas graves, informó el lunes por la noche Josef Nae Soi, vicegobernador de la provincia, en una conferencia de prensa.
Al menos 84 personas murieron en inundaciones repentinas en otros lugares y 71 seguían desaparecidas en la provincia, dijeron autoridades locales en la conferencia de prensa virtual. También se reportaron graves inundaciones en Bima, una localidad en la cercana provincia de Nusa Tenggara Occidental, donde murieron dos personas y cerca de 10,000 casas quedaron anegadas.
Las labores de auxilio se vieron obstaculizadas por cortes de electricidad, bloqueos de lodo y escombros en las carreteras y lo remoto de las zonas afectadas, en una isla a la que sólo se puede llegar por mar y que actualmente está rodeada por aguas agitadas y grandes olas, según Raditya Jati, portavoz de la agencia.
Unas fotografías publicadas por la Agencia Nacional de Alivio de Desastres de Indonesia mostraban a los rescatistas mientras llevaban a los residentes a unos refugios.
Se recuperaron 13 cuerpos luego de que fueron arrastrados por las inundaciones registradas en el distrito de Alor, donde decenas de viviendas quedaron destrozadas, de acuerdo con Soi. Cientos de personas huyeron de sus casas sumergidas, algunas de las cuales fueron arrastradas por las aguas.
En otro distrito, Ende, dos personas fallecieron luego de que unas lluvias registradas durante la noche provocaron crecidas en los ríos, enviando agua fangosa a grandes zonas del distrito de Flores Oriental, añadió Soi.
Las lluvias también provocaron que lava solidificada descendiera por las laderas del volcán Ili Lewotolok y azotara varios poblados. Ese desastre en la isla de Lembata causó la muerte de por lo menos 67 personas, que quedaron sepultadas bajo toneladas de lava sólida, comentó Eliaser Yentji Sunur, jefe del distrito de Lembata, durante la misma conferencia de prensa. La lava quedó allí tras la erupción del volcán en noviembre.
Cientos de personas participaron en las labores de rescate el lunes. Diez distritos y la capital provincial de Kupang se vieron afectados por inundaciones repentinas y un alud que dañaron cinco puentes y varias instalaciones públicas en la provincia de Nusa Tenggara Oriental, señaló Jati.
Agregó que más de 950 viviendas resultaron dañadas, incluidas docenas que fueron aplastadas o arrasadas por inundaciones y lodo, obligando a 2.655 personas a huir a albergues del gobierno.
El presidente indonesio Joko Widodo dijo que había ordenado a sus ministros y a los jefes del ejército, de la policía y de la agencia de desastres que implementaran las medidas de respuesta a emergencias lo antes posible.
“Puedo sentir el dolor de nuestros hermanos y hermanas allí causado por estos desastres”, dijo Widodo en un discurso televisado, ofreciendo profundas condolencias a las víctimas.
En Timor Oriental, 13 personas murieron en la capital, Dili, y al menos 14 cuerpos fueron recuperados en otras partes de la nación luego de que las lluvias provocaron deslaves y desbordamiento de represas.