Se llevó a cabo la inauguración de un centro comercial en la capital del estado de Pará, Brasil, a la cual se conglomeraron miles de personas, quienes sin cubrebocas ni respetando la distancia social, accedieron al inmueble entre empujones, avalanchas y gritos.
Los hechos ocurrieron en el centro comercial número 150 de Havan, una reconocida cadena que es propiedad de Luciano Hang, empresario amigo del presidente Jair Bolsonaro quien además fue parte del acontecimiento e interactuó con empleados y clientes sin usar mascarilla ni respetar las medidas de distanciamiento
Las imágenes circularon en redes sociales y se hicieron virales inmediatamente debido a la multitud que se observa ingresando precipitadamente a la plaza para aprovechar las rebajas por la apertura.
La Secretaría de Salud Pública de Pará culpó al municipio de Belén de no controlar el acceso al recinto y aseguró que enviaron una patrulla sanitaria tras la aglomeración.
Es importante puntualizar que el empresario Hang es un público defensor de las políticas de Bolsonaro, y es uno de los pocos políticos del mundo que minimizaron los efectos del COVID-19, y quien, además ya se contagió de coronavirus