La líder de la oposición en Bielorrusia, María Kolésnikova, fue secuestrada por desconocidos presuntamente enviados por el gobierno en la capital Minsk y hasta el momento se desconoce cuál es su paradero.
Kolésnikova, de 38 años, fue interceptada en el centro de la ciudad por un grupo de enmascarados que la subieron a un vehículo con dirección desconocida.
Tras lo acontecido, la Policía de Minsk afirmó que ninguno de sus agentes detuvo a la mujer.
De acuerdo con la líder del Consejo Coordinador de la oposición bielorrusa en el exilio, Svetlana Tijanóvskaya, acusó a las autoridades de “practicar el terror” y dijo que la organización también ha perdido la comunicación con otros miembros como Antón Rodnenkov e Iván Kravtsov.
Por su parte, el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell, aseguró lo ocurrido es inaceptable.
“Las detenciones arbitrarias y secuestros por motivos políticos en Bielorrusia son inaceptables. Las autoridades estatales deben dejar de intimidar a ciudadanos y violar sus propias leyes y obligaciones internacionales”.