Por Luis Carlos Rodríguez G.
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El nombre del expresidente Enrique Peña Nieto fue mencionado en el segundo día del juicio en contra Emilio Lozoya Austin, cuando la Fiscalía General de la República (FGR) señaló que Odebrecht dio cuatro millones de dólares al exdirector de Pemex para financiar la campaña presidencial del PRI de 2012 y que incluso se ofreció un cargo en el gabinete federal a ejecutivos de la empresa brasileña.
Lozoya se declaró este miércoles “no culpable” de actos de corrupción que involucran a la brasileña Odebrecht y reiteró que fue “utilizado” por un “aparato organizado del poder”, todo ello en proceso que se perfila con involucrar al expresidente Peña Nieto y al exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray.
La FGR imputó a Lozoya por su presunta responsabilidad en los delitos de asociación delictuosa, cohecho y operación con recursos de procedencia ilícita, porque intentó ocultar diversos movimientos y cuentas bancarias, particularmente cuando era coordinador de asuntos internacionales de la campaña de Enrique Peña Nieto, candidato a la Presidencia en 2012.
Asimismo, la FGR reveló, durante el ofrecimiento de datos de prueba, que Lozoya agradeció en diversas ocasiones a Luis de Meneses, entonces representante de la empresa brasileña en México, por el “apoyo brindado por Odebrecht a la campaña de Enrique Peña Nieto” e incluso ofreció un cargo a un representante de la empresa brasileña en el gabinete presidencial en caso de ganar la elección y contratos a favor de ese consorcio.
“Hubo pagos en beneficio por 4 millones de dólares durante la campaña y otro por 6 millones de dólares cuando fue director de Pemex”, apuntó la fiscalía mexicana como parte acusadora y además ofreció como dato de prueba un oficio de mayo de 2019 de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) que detalla documentación de una cuenta bancaria de la madre de Lozoya Austin.
Asimismo, se le imputa a Lozoya el delito de cohecho por reunirse con representantes de la empresa brasileña cuando ya era director de Pemex y éstos le solicitaron su apoyo para ser beneficiados con contratos de obras públicas.
Por su parte, Lozoya, desde la cama del hospital Ángeles del Pedregal, en donde se encuentra hospitalizado por una anemia severa y problemas en el esófago, expuso ante el juez en la audiencia remota que “de manera respetuosa hacia la autoridad quiero que sepa que no soy culpable ni responsable de los hechos que se me imputan en el marco de la investigación”.
“Asimismo, manifiesto a usted que denunciaré, señalaré a las personas responsables de estos hechos y los posibles beneficiarios de los mismos”, declaró.
La defensa de Emilio Lozoya, a cargo de Miguel Ontiveros Alonso y Alejandro Rojas Pruneda, señaló que el allanamiento realizado del juicio de extradición muestra un ánimo de colaboración con el Estado mexicano y en especial con la FGR, con el objetivo de “la búsqueda de la verdad”.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, en su conferencia mañanera, dijo que el exdirector de Pemex “va a tener ciertas consideraciones, porque lo que se busca es conocer más sobre los ilícitos”.
“Ayer habló de que va a dar a conocer nombres y todo el proceso. Utilizó un término hablando de la maquinaria de poder… aparato organizado de poder. No afecta los contratos, las rondas, de la reforma energética y mantener el compromiso de no hacer ninguna modificación del marco legal energético hasta que podamos demostrar que es posible fortalecer a Pemex y a CFE”, dijo el mandatario.
