Debido al incremento de contagios y hospitalizaciones por Covid-19, la Ciudad de México y el Estado de México anunciaron este viernes el regreso al semáforo rojo, por lo que suspenderán actividades no esenciales a partir de este sábado 19 de diciembre y hasta el 10 de enero de 2021.
Las actividades que permanecerán, pero con restricciones son:
Venta de alimentos sin preparar y preparados exclusivamente como servicio de entrega para llevar, no en local
Sectores de energía, transporte, manufactura, salud, servicios funerarios, construcción, financieros y de telecomunicaciones.
Fabricación, comercialización y venta de medicamentos, esto incluye a la cadena de proveeduría y venta final.
Talleres de reparaciones y refacciones.
Servicios del gobierno de los sectores tributario, seguridad, obra pública, agua y servicios necesarios para su operación.
Las especificaciones de cada sector serán emitidas por los gobiernos locales de la Ciudad de México y el Estado de México con los respectivos decretos publicados en gacetas oficiales.
La Ciudad de México pasó a naranja en el semáforo epidemiológico el pasado 29 de junio, lo que permitió una reapertura de actividades cada vez mayor. Pero en las últimas semanas el gobierno capitalino ha implementado medidas restrictivas y disminuido horarios a fin de frenar la propagación de la Covid-19.
Al día de hoy, la capital acumula 277 mil 733 casos confirmados de Covid-19 y 19 mil 583 decesos por la enfermedad, con un aumento de 4 mil 289 nuevos contagios en las últimas 24 horas y 174 nuevas defunciones.
En el Estado de México la situación es similar. La entidad pasó a semáforo naranja el pasado 20 de julio, pero en las últimas semanas, por el aumento de casos de Covid-19, se han restringido los horarios de los negocios no esenciales.
El Edomex acumula 123 mil 884 casos confirmados de Covid-19, de los cuales 13 mil 71 han muerto desde que comenzó la pandemia.
Alfredo del Mazo, gobernador del Estado de México, señaló que la ocupación hospitalaria en la entidad es del 75%, una cifra similar a la registrada en junio, cuando la pandemia tenía apenas cuatro meses.
