Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) estimó que la decisión del Congreso de Oaxaca sobre prohibir la venta de alimentos y bebidas azucaradas considerados “chatarra” a menores de edad restará alrededor de 100 millones de pesos diarios en comercios de la entidad.
Por ello, demandarán que el gobierno estatal, encabezado por Alejandro Murat, vete o congele la modificación a la Ley de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la entidad que proscribe la venta de estos alimentos y bebidas.
“Estos productos son el motor de venta del canal, y empujan el 50% de las ventas y significa dejar de vender en Oaxaca 100 mdp diarios””, expuso.
El decreto votado el miércoles señala que dichos alimentos no se venderán, regalarán, distribuirán o suministrarán a menores de edad en la entidad; no obstante, madres, padres y tutores podrán proporcionarles estos productos. Las medidas señalan que la restricción corresponde con los niveles de azúcares, grasas saturadas, grasas trans y sodio añadidos establecidos en la NOM-051 que establece el nuevo etiquetado en los alimentos.
A juicio de Rivera, esta medida tomada por 31 legisladores locales obedece a criterios políticos para respaldar el pronunciamiento del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, quien en semanas pasadas acusó de la responsabilidad de los refrescos en la alta incidencia de comorbilidades como diabetes, hipertensión y obesidad en personas que se han contagiado de Covid-19 y que han fallecido tras contraer la enfermedad.
“Los (diputados) de Oaxaca, emulando a Gatell, quieren presentarse políticamente correctos y están viendo su futuro político también”, comentó.
La Anpec lanzó la tarde del miércoles un comunicado en que llaman al gobernador Murat a vetar esta medida que, desde su perspectiva, generará más pobreza en la entidad.