Colombianos y mexicanos protestaron en Embajada de Colombia en México para protestar por la represión del Gobierno de Iván Duque en el país andino, donde las manifestaciones han dejado al menos 24 muertos y 800 heridos
Una gran cantidad de inconformes bloquearon una de las vías del Paseo de la Reforma para escribir en la calle “Fuerza Colombia” y “Fuera Duque asesino” frente a la sede diplomática, donde policías locales resguardaban el inmueble.
Tatiana Ortega, una joven colombiana en México, acusó al Gobierno de Duque de “convertir en algo violento” las manifestaciones pacíficas que empezaron la semana pasada contra la reforma tributaria, pues ahora “están matando gente y están violando muchachas”.
“La gente lo que está pidiendo es que Duque se vaya porque ya ha hecho mucho mal al país. Él es el que da la orden de que los policías ataquen al pueblo, entonces básicamente es por eso que estamos aquí demostrando apoyo”, contó Ortega.
Colombia vive desde hace una semana manifestaciones contra el Gobierno de Duque, quien el domingo retiró su proyecto de reforma fiscal que detonó el conflicto y por el que el pasado lunes renunció el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla.
Sin embargo, miles de colombianos volvieron a las calles en una nueva jornada de “paro nacional” convocada por sindicatos y centrales obreras en contra de una reforma a la salud.
El descontento social sigue volcado en las calles, donde se han vivido caóticos días de violencia y destrucción por la respuesta de las fuerzas de seguridad, lo que ha causado “profunda alarma” en la ONU.
Con gritos de “A parar para avanzar” y “Viva el paro nacional”, los manifestantes en México se solidarizaron con la situación de Colombia.
Aunque la Unión Europea (UE), la Organización de Estados Americanos (OEA) y la izquierda de países como Uruguay y Bolivia han condenado el uso desproporcionado de la fuerza pública en Colombia, el mandatario de México, Andrés Manuel López Obrador, rechazó pronunciarse.
“No intervenimos, no opinamos, porque nos ceñimos al principio de la no intervención y de la autodeterminación de los pueblos”, respondió AMLO al cuestionamiento de un periodista en rueda de prensa.
En la protesta, varios mexicanos portaron banderas con la leyenda “Guardar silencio es ser cómplice “.
No obstante, Alberto Mena acudió a la marcha al señalar que su hija está casada con un colombiano y no le gustaría que su nieto padezca la represión, pero respetó la decisión del presidente de no intervenir.
“Celebro que el presidente López Obrador no se pronuncie porque tiene que respetar su postura de jefe de Estado, pero los que sí podemos salir y tenemos voz, y podemos hacernos patentes al solidarizarnos con la lucha, pues tenemos que hacerlo”, mencionaron.