Enrique Alfaro Ramírez, gobernador de Jalisco, pidió al presidente Andrés Manuel López Obrador reforzar la seguridad en los límites con los estados de Guanajuato, Michoacán y Zacatecas, que registran altos niveles de inseguridad y violencia.
En la conferencia matutina llevada a cabo en Zapopan, Alfaro Ramírez reconoció que hay “grupos delictivos muy fuertes” en la entidad.
“La prioridad que le planteamos al presidente es el refuerzo de los límites con Zacatecas por un lado y con Michoacán por otro lado, la presencia con mayor fuerza en los altos de Jalisco, particularmente en los límites con Guanajuato y la manera en la que podemos reforzar nuestra presencia en el área metropolitana de Guadalajara en un esquema de coordinación, con las Policías locales tanto estatal como municipal”. refirió.
El mandatario jalisciense aseguró que la incidencia delictiva del estado se encuentra por debajo de la media nacional, al pasar de mil 318.6 delitos por cada 100 mil habitantes a mil 258, lo que significa una reducción del 24.6 por ciento.
Es importante es entender que después de muchos años en lo que Jalisco estuvo por encima de la media nacional de la incidencia delictiva, este año hemos logrado ya desde hace varios meses poder tener a nuestro estado por debajo de la media nacional el incidencia delictiva total”, explicó.
En donde también destacó una baja es en los homicidios dolosos, al pasar de 23.6 a 22.9 en la tasa de homicidios por agresión directa.
López Obrador dijo tener una buena relación con el gobernador Enrique Alfaro, y dejó en claro que en materia de seguridad no se pueden tener diferencias entre ambas Administraciones.
“Con el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, con el que llevamos buena relación, sobre todo en este tema, bueno también en salud, pero fundamentalmente en lo que tiene que ver con la seguridad”, aclaró.
“No nos podemos pelear cuando se trata de garantizar la paz y la tranquilidad de los ciudadanos”, expresó.