A pesar de que México tiene contratos con varios laboratorios para la compra de 198 millones de dosis de vacunas contra el Covid-19, de las cuales 250 mil llegarán a finales de diciembre, el proceso de inmunización se realizará a cuenta gotas durante todo el 2021 y parte del 2022, por lo que la pandemia aún durará varios meses en el país, ya que para alcanzar la llamada inmunidad rebaño se requiere inmunizar a 100 millones.
Aseveró lo anterior la investigadora del Instituto de Biotecnología (IBT) de la UNAM, Laura Palomares, quien encabeza uno de los dos proyectos de la máxima casa de estudios del país para lograr una vacuna mexicana, puntualizó que para alcanzar la inmunidad de rebaño al menos tenemos que tener el 70 por ciento de la población vacunada.
“Idealmente el 80 por ciento y estas dosis que están prometidas y anunciadas por el gobierno mexicano, como son las 250 mil y los otros 34 millones comprometidas con Pfizer, no van alcanzar para ese 80 por ciento de la población y para lograr esa meta se tardarán varios meses”.
Es decir, si actualmente la población en México es de 127 millones de personas, deberán estar vacunados al menos 101 millones para lograr la inmunidad rebaño y frenar los contagios.
Sin embargo, el gobierno mexicano anunció el pasado 13 de octubre la firma de contratos por los cuales México adquirirá más de 198 millones de dosis de vacunas contra Covid-19, así como la realización de ensayos fase 3, con los cuales se pretende proteger a entre 107 y 116 millones de personas en el país.
Hay acuerdos con AstraZeneca para la precompra de 77.4 millones de dosis para 38.7 millones de personas, las cuales se entregarán entre marzo y agosto 2021.
Con CanSino, el gobierno adelantó el pago para recibir 35 millones de dosis, entre diciembre de 2020 y septiembre de 2021.
También se firmaron contratos de precompra con Janssen, de Estados Unidos; Sputnik V, de Rusia; Novavax, de Estados Unidos; Curevac, de Alemania; Sanofi- Pasteur, de Francia; y ReiThera, de Italia.
La doctora Laura Palomares, dijo a ContraRéplica que si bien es una buena noticia el arribo de las primeras vacunas 250 mil dosis, que servirán para 125 mil médicos y enfermeras, de los más de 700 mil que requieren de reactivo en el país.
Sin embargo, recordó que de acuerdo al esquema de la Secretaría de Salud, pasarán meses para vacunar al grueso de la población y por ende la pandemia se mantendrá por un largo periodo.
“Aunque esté la vacuna circulando, tenemos que mantenernos con cuidados como el cubrebocas, la sana distancia, no fiestas, no reuniones masivas por un tiempo largo, por lo menos varios meses. El que exista una vacuna no significa que todos andemos libres, por el contrario, vamos a tener que permanecer con todas estas medidas hasta que no haya una vacunación accesible para el grueso de la población y eso no va a pasar pronto”, apuntó.
Expuso que los primeros lotes de vacunas no van a alcanzar ni siquiera para el personal de primera línea del Sector Salud y médicos privados que trabajan con la pandemia, y que suman alrededor de 700 mil médicos y enfermeras.
Recordó que las primeras vacunas que llegarán a México y que ya hizo su solicitud ante la Cofepris, que es la de Pfizer, está indicada para personas que no están enfermas de Covid-19, para personas mayores de 16 años y no está indicada para mujeres embarazadas.
“Si alguien tiene Covid no tiene ningún sentido vacunarlo. Solo una vez que se recupere y que lo recomiende su médico. Si ya se enfermó puede quedar al final de la cola para recibir la vacuna”, consideró la especialista de la UNAM.
Comentó que en el estudio de Pfizer en el tema de la inmunidad señala que se requieren dos dosis. Una primera dosis y 21 días después la segunda. Según el laboratorio son 7 días después de la segunda dosis ya hay una inmunidad protectora.
Respecto a la infraestructura para su distribución en México, Laura Palomares dijo el tema de la temperatura es sin duda un reto. Pfizer lo ha controlado de distintas maneras, una es con contenedores donde ellos dicen que la vacuna puede ser estable durante dos semanas, cuando se le este agregando el hielo seco.
“La otra opción es mantener la vacuna, descongelarla y nos reportan que puede estar por cinco días a 4 grados en un refrigerador normal”, agregó la doctora, ingeniera química e investigadora en medicina molecular
Añadió que de todas formas esto implica retos importantes que habrá que ver cómo los vamos a poder resolver. “Yo creo que eso no nos va a limitar y van a llegar esas 250 mil dosis que están prometidas, pero la semana pasada Pfizer reportó retrasos en su cadena de suministro de vacuna, pero si llegarán básicamente será para personal de salud, médicos, enfermeras, trabajadores del sector, que es donde están estos sitios de almacenamiento donde hay refrigeradores de menos 70 grados”.
Subrayó que lo que nos va a limitar en un inicio es el número de vacunas que vamos a recibir más que la posibilidad de mantenerlas a temperaturas tan bajas. “Estoy segura que la estrategia de distribución se enfocará en sitios donde esto se resolverá”.
“Todas las vacunas tienen una fecha de caducidad después de que se envasan. En estas en particular no se cómo se hayan establecido, porque para fijarlas se hacen estudios de estabilidad que involucran que debe pasar el tiempo y obviamente ahorita no será un problema, porque será urgente su aplicación a la población. El promedio de caducidad es por varios meses o hasta un año”, concluyó la investigadora de la UNAM.