Después de una larga espera, Roger Federer regresó a pisar su hábitat natural pero lamentablemente no fue agradable.
El suizo fue derrotado en su debut en el ATP 250 de Ginebra por el español Pablo Andújar (75° del ranking), por 6-4, 4-6 y 6-4, en el que fue el primer partido en polvo de ladrillo del ex número uno mundial en casi dos años. Más allá de haber sido eliminado, el tenista apunta a mejorar para su participación en Roland Garros y Wimbledon.
Una de las principales carencias que mostró Roger fue que no se mostró cómodo con su servicio y obviamente la falta de ritmo de competencia. Pero hubo momentos en los que se pudo ver ese exquisito tenis que presenta Federer y la vuelta fue con un sabor más positivo que negativo. Aunque era el primer preclasificado del ATP 250, la expectativa del local no estaba en lograr levantar el título sino en regresar a disputar partidos de alto rendimiento.
Motivado por el reducido público presente en las gradas (apenas un centenar de espectadores) como consecuencia de las restricciones por la pandemia, Federer mejoró su nivel con algunos destellos que recordaron la magia que tuvo en su momento en la raqueta para equilibrar el partido en el segundo capítulo. En el tercer set salvó dos pelotas de partido, pero en la tercera oportunidad su oponente no la desaprovechó.
Federer volvió a perder un partido en su país luego de ocho años: su última derrota había sido en 2013 cuando enfrentó a Juan Martín Del Potro en la final del ATP 500 de Basilea. Desde aquella caída, hilvanó un total de 32 triunfos seguidos que le permitieron ganar dicho torneo en cinco ocasiones (2014, 2015, 2017, 2018 y 2019).
“Solo me preocupa dónde está mi juego. Los muchachos en la gira están todos en un buen ritmo. El nivel que todos están produciendo es grandioso. Quiero lograr eso también nuevamente”, manifestó en la previa del duelo.
Por otra parte, Pablo Andújar demostró una gran calidad de tenis y se tomó la cabeza cuando logró cerrar el encuentro. El español venía de derrotar al australiano Jordan Thompson en la fase previa y ahora se clasificó a los cuartos de final en Suiza.
Cabe recordar que durante 2020 Federer pasó por dos operaciones de rodilla que lo alejaron de las canchas desde febrero del año pasado a marzo de 2021. A dos meses y medio de cumplir los 40 años, Roger disputó en Ginebra su tercer partido este año y lamentablemente no le fue bien. El gran objetivo del ex número 1 del mundo es llegar al 100% a Wimbledon donde sueña levantar el trofeo por 9ª vez en su carrera, récord en el circuito masculino.