Un juez federal falló ayer que el gobierno de Estados Unidos debe dejar de utilizar una orden de salud pública para expulsar a familias migrantes con niños que son detenidas en la frontera con México.
El juez Emmet Sullivan dio al gobierno de Joe Biden dos semanas para detener una práctica que, según los opositores, es innecesaria y se basa indebidamente en la amenaza que representa la pandemia de covid-19.
Sullivan concedió un interdicto preliminar en respuesta a una demanda presentada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) y otros a nombre de las familias migrantes, y dijo que era probable que tuvieran éxito en su impugnación al uso de la ley de salud pública conocida como Título 42.
El presidente (Joe) Biden debería haber puesto fin a esta política cruel e ilegal hace tiempo, y el tribunal ha hecho bien en rechazarla hoy’’, dijo Omar Jadwat, director del Proyecto Derechos de los Inmigrantes de la ACLU.
El Título 42 fue aplicado al comenzar la pandemia, durante el gobierno del presidente Donald Trump, para ayudar a controlar la propagación de virus en instalaciones de detención al devolver a los migrantes detectados por la Patrulla Fronteriza sin darles una oportunidad de pedir asilo en EU.
El juez afirmó que el uso del Título 42 en este caso es “probablemente ilegal” y también innecesario “en vista de la amplia disponibilidad de pruebas, vacunas y otras medidas de minimización” para hacer frente a la propagación de covid.
Después de que Biden fue elegido, EU suspendió la práctica de expulsar a niños que cruzaban la frontera sin un acompañante.
En agosto, Estados Unidos usó el Título 42 para expulsar a 16,240 personas que viajaban en grupos familiares, según las estadísticas más recientes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza.
En el mismo mes, se halló a más de 86 mil migrantes con niños a lo largo de la frontera.
La cifra total de migrantes detectados a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos en agosto fue de casi 209 mil, un descenso de 2% en comparación con el mes previo, pero aún por encima de periodos recientes de actividad elevada en 2019 y 2014, y se ubicó en niveles no vistos desde el año 2000.
Y en medio de la crisis migratoria, alcalde de Del Río, Bruno Lozano, confirmó que unos cinco mil 600 migrantes esperan bajo el Puente Internacional de Del Río, en Texas, que funciona como un centro de recepción temporal de migrantes indocumentados.
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