Recientemente se anunció la efectividad del medicamento ruso Remdesivir para el combate al coronavirus. Tras ello, el gobierno del presidente Donald Trump realizó un rápido acuerdo para comprar la totalidad de la producción del fármaco del mes de julio y asegurar el 90% del stock del mes de agosto. Tal suministro, se proyecta le será util por tres meses a la nación norteamericana.
Debido a que el fármaco está patentado, aún no se puede reproducir, comprar ni distribuir sin autorización. La compra por parte del gobierno de Trump deja con apenas un 10% de oportunidad de adquirirlo a todos los demás países, mismos cuyas opciones ya eran limitadas.
El fármaco es producido por Gilead Sciences y está patentado. Su efectividad ha demostrado que los pacientes covid-19 tratados con Remdesivir se restablecen aproximadamente cuatro días antes que quienes son tratados con otros fármacos.
“El presidente Trump ha hecho un trato asombroso para asegurar que los americanos tengan acceso a la primera terapéutica autorizada para COVID-19”, dijo el secretario del HHS, Alex Azar.
Por otra parte, la compra realizada por Trump pone en alerta a los gobiernos al rededor del mundo respecto a la espera de una vacuna contra el covid-19. Pues un acaparamiento comercial similar pondría en aprietos a los gobiernos en vías de desarrollo que también requieren de cura para el virus y no cuentan con la misma capacidad económica.