Con el fin de recordar a las mujeres que han sido víctimas de feminicidios, integrantes de la agrupación Marea Verde Altas Montañas colocaron una ofrenda en el parque Apolinar Castillo.
Luz María Reyes Huerta, integrante de esa organización feminista, indicó que el objetivo es mantener viva la memoria de estos casos de violencia extrema en donde prevalece la impunidad.
Destacó que las mujeres que son víctimas de violencia lo único que ven es impunidad para su agresor, la cual persiste hasta en los casos que llega al feminicidio, pues solo en el uno por ciento de los delitos que se denuncian hay una sentencia.
Esta situación de impunidad, destacó, es un factor que alimenta que siga y escale la violencia, pues el agresor se da cuenta que puede pegarle a la mujer, dejar de cumplir con sus obligaciones alimentarias, violentarla psicológicamente, y no pasa nada.
Indicó que cuando una mujer pone una denuncia por violencia, puede pasar de un año hasta año y medio para que pase al juez de control.
Entonces, en ese tiempo, abundó, la mujer sigue expuesta al agresor y este se burla, porque le hace ver que denunció y no pasó nada.
Lamentablemente, añadió, la violencia puede escalar hasta llegar al feminicidio, y se sigue viendo que tampoco pasa nada, que la familia denuncia y a veces el asesino nunca recibe castigo.
Reyes Huerta comentó que de acuerdo con cifras del Colectivo Feminista Cihuatlahtolli, a la fecha 125 mujeres han sido asesinadas, y de acuerdo con el Observatorio de Violencias, 60 de esas muertes se enmarcan en feminicidios.
Las integrantes de Marea Verde iniciaron su actividad con la demanda por la legalización al aborto, para más tarde colocar la ofrenda alusiva a los feminicidios.