Israel cerró todas sus playas hacia el Mar Mediterráneo hasta nuevo aviso, luego de que un derrame de petróleo lejos de la costa arrojó decenas de toneladas de alquitrán a lo largo de más de 160 kilómetros (100 millas) de litoral, las autoridades consideran el peor desastre ecológico del país.
Los activistas comenzaron a informar sobre manchas pegajosas de alquitrán en la costa de Israel la semana pasada luego que una fuerte tormenta arrojó los derivados de petróleo a la orilla, causando estragos en la vida silvestre.
Investigadores del Ministerio de Agricultura del país determinaron que una joven ballena de aleta cuyos restos llegaron a una playa del sur de Israel falleció por ingerir el negro y viscoso líquido, de acuerdo con la radiodifusora pública israelí Kan.
La Autoridad de Naturaleza y Parques de Israel ha calificado al derrame como “uno de los desastres ecológicos más serios” en la historia del país.
En 2014, un derrame de crudo en el Desierto de Aravá causó severos daños en uno de los delicados ecosistemas del país.
No se sabe la causa exacta del derrame, el cual actualmente es investigado por autoridades ambientales de Israel.
La ministra de Protección Ambiental, Gila Gamliel, dijo a medios hebreos que su agencia calcula que las tareas de limpieza costarán decenas de millones de nuevos shekels (la moneda nacional).
Benjamin Netanyahur, primer ministro israelí realizó un recorrido por una de las playas del país picadas con alquitrán el domingo y elogió la labor de la ministra.
