El ascenso imparable de los contagios y fallecimientos a consecuencia del Covid-19 y la propagación nacional de la dos veces más contagiosa variante P1 del virus han colocado a Brasil en una situación trágica. El gigante pasó de mil 74 muertes diarias el 13 de febrero a mil 910 el 4 de marzo; y a 3 mil 258 anteayer, 20 días después, y contando.