El mandatario Andrés Manuel López Obrador consideró que, si la Fiscalía General de la República (FGR) lo considera, podría llamarse a los expresidentes Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón, para hacer declaración sobre los casos de corrupción vinculados a Odebrecht.
En conferencia de prensa, desde Oaxaca,el presidente fue cuestionado directamente sobre la conveniencia de que Peña Nieto comparezca ante las autoridades.
No obstante, López Obrador consideró que las indagatorias podrían llegar también al sexenio de Felipe Calderón.
“¿La Fiscalía podría llamar a Peña Nieto?”, se le preguntó en conferencia.
“Yo creo que todos los involucrados, si así lo decide la FGR, todos tienen que comparecer. Aquí son dos cuando menos, son dos sexenios, porque no es sólo el caso de la reforma energética, es Odebrecht y eso viene del sexenio de Felipe Calderón. Son procesos que se complementan, entonces todos”, respondió.
Frente al gobernador priista de Oaxaca, Alejandro Murat, el presidente subrayó su postura sobre las reservas que ha expresado en relación a la posibilidad de juzgar a los expresidentes que estuvieron relacionados con actos de corrupción.
Sin embargo, advirtió que no será “tapadera” de nadie ni frenará desde el Ejecutivo ningún proceso judicial.
“Ya conocen también mi postura en el caso de los expresidentes, ya lo he dado a conocer desde que tomé posesión, dije que solo si el pueblo lo demandaba, lo decidía a través de una consulta“, manifestó.
“Pero también yo no puedo detener un proceso judicial, esto corresponde a la FGR. Lo que no vamos hacer es fabricar delito a nadie, no es mi fuerte la venganza, no podemos actuar con impunidad, es decir, no ser tapadera”.
Andres Manuel insistió en que, además de los procesos formales, es necesario exhibir y estigmatizar públicamente a quienes incurrieron en actos de corrupción.
“Y yo lo que sostengo, a mi me importa mucho esto, más que por la cuestión jurídica, legal, por las acusaciones penales, lo que me importa más es que se limpie al país de corrupción, que quede desterrada la corrupción por abominable, que todos los mexicanos rechacemos la corrupción, que se estigmatice a la corrupción y al corrupto”, mantuvo.
“Antes, se le llamaba ladrón al que se roba una gallina, al que se robaba un pavo, una bolsa en el mercado, un cilindro de gas, la ropa que quedaba tendida en el patio y los grandes ladrones ni siquiera perdían su respetabilidad, hasta se les ponía de ejemplo, cuántas veces hemos hablado de lo que querían imponer las máximas de que ‘si no tranzas no avanzas’, si tienes un cargo y no aprovechas la oportunidad eres un tonto, político pobre, pobre político, la moral es un árbol que da moras y que sirve para pura… cosa”, sentenció AMLO.
López Obrador consideró que es muy importante acabar con la corrupción, aunque aclaró que no se trata de hacerlo “en plan vengativo o espectacular” como se hacía en el pasado, cuando sólo detenían a funcionarios menores para engañar a la ciudadanía y hacer pensar que se imponían castigos.
“Agarraban un chivo expiatorio para engañar de que iba a acabarse la corrupción y seguía la corrupción, no solo seguía, era cada vez mayor”, afirmó.
“Entonces, ahora queremos desterrar la corrupción y acabar la corrupción”.