Por Sheila Casillas
Con 263 votos a favor, 85 en contra y 43 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma para que la Secretaría de Marina (Semar) controle todos los puertos del país, pese a las acusaciones de partidos opositores sobre la militarización del país.
La iniciativa propuesta por Morena consiste en asignar a la Marina el control total de todos los puertos del país y quitarle esta facultad a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes.
Tras un debate de más de tres horas, en el que distintos integrantes de la oposición acusaron la militarización de los puertos, se lograron 263 votos a favor de Morena, PT, PES y Verde; 43 abstenciones del PRI y PAN y 85 del PAN, MC y PRD en contra de esta reforma que modifica Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, de la Ley de Navegación y Comercio Marítimos, y de la Ley de Puertos.
La asociación civil México Unido Contra la Delincuencia lanzó un comunicado alertando sobre los riesgos que implica la militarización de la marina mercante y aduanas.
“En MUCD alertamos que al trasladar funciones de la SCT a la Semar se aumentan las atribuciones de la Secretaría de Marina más allá de lo permitido por el artículo 129 y 73 fracción XIII de la Constitución, que establece la limitación de las autoridades militares únicamente al auxilio o apoyo de las instituciones civiles.
Finalmente, a pesar de que el dictamen se encuentra enfocado en tener como objetivo principal el combate a la corrupción, alertamos que no existe evidencia que respalde esta afirmación.
Desde MUCD lamentamos profundamente la decisión tomada por el Pleno de la Cámara de Diputados al aprobar este dictamen a pesar de contar con vicios tales como ignorar el turno a la comisión de Marina con la opinión de la Comisión de Transportes y ser aprobada únicamente por la Comisión de Gobernación y Población. Conminamos al Senado de la República a rechazar tajantemente el proyecto de modificaciones a Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, de la Ley de Navegación y Comercio Marítimos y de la Ley de Puertos por ser abiertamente contrario a la Constitución”.