Barcelona comenzó el proceso para un recorte salarial a sus futbolistas y personal, esto como medida para solventar su economía durante la crisis del COVID-19 en sus finanzas.
Anteriormente el club ya había impuesto un recorte temporal del 70% que permaneció hasta junio. Además, a principios de este mes el Barça perdió 97 millones de euros (114.89 millones de dólares) y una caída de 14% en los ingresos respecto al año anterior.
«El Club prevé una caída de ingresos superior a 30 por ciento y, en consecuencia, está obligado a encontrar soluciones inmediatas que ayuden a rebajar el capítulo de gastos», informó el equipo en un comunicado.
En cuanto al regreso de los aficionados a los estadios, se estima que eso podría ocurrir hasta que exista una vacuna efectiva contra el nuevo coronavirus.