En los primeros dos años de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, el peso no sólo no ha perdido valor frente al dólar, sino que se ha apreciado ligeramente, superando lo hecho por sus dos predecesores: Enrique Peña Nieto y Felipe Calderón, quienes en el mismo lapso enfrentaron una fuerte depreciación de la moneda.
De acuerdo con el registro del Banco de México, cuando el gobierno actual tomó el mando, el primero de diciembre de 2018, el tipo de cambio interbancario se ubicaba en 20.30 pesos por dólar, y ahora se ubica en se encuentra en 19.80 unidades, es decir, tras dos años se ha apreciado aproximadamente 2.5 por ciento.
En contraste, en diciembre de 2006, Felipe Calderón tomó las riendas del país con un peso cotizando en 10.93 unidades por billete estadunidense, dos años después estaba en 13.59, es decir, una depreciación de alrededor de 24 por ciento. A lo largo del sexenio del panista la moneda mexicana se mantendría en esos mismos niveles.
Para la llegada de Enrique Peña Nieto, en diciembre de 2012, el tipo de cambio interbancario cotizaba en 12.96 pesos por dólar y dos años después, es decir, en el último mes de 2014, la moneda se encontraba en 13.94 por divisa estadunidense, una depreciación de 7.53 por ciento.
A lo largo del mandato de este último el peso mexicano perdió aproximadamente 50 por ciento de su valor, pues de cotizar en casi 13 unidades por dólar, se disparó a 20 pesos.
Durante lo que va del sexenio de López Obrador el tipo de cambio ha enfrentado fuertes presiones provocadas, principalmente, por la pandemia de Covid-19, que en mayo pasado lo llevó a niveles hasta de 25 pesos por dólar, es decir, una depreciación de casi 25 por ciento respecto a los niveles de diciembre de 2018.
Sin embargo, contra todo pronóstico (algunos especialistas estimaron que llegaría a niveles de 30 pesos por dólar), la moneda mexicana ha mostrado resiliencia y no sólo se ha recuperado, sino que está en un menor nivel que hace dos años.
Gabriela Siller, economista en jefe de Banco Base, indicó que la fuerte depreciación que mostró el peso durante el inicio de la pandemia de Covid-19, se dio como consecuencia de que se descartaron apoyos fiscales para impulsar la economía, a lo que se sumó la incertidumbre por la cancelación de una planta cervecera en Mexicali.
Sin embargo, después regresó el optimismo de los inversionistas, en parte, gracias a que a diferencia de otras naciones, México ha enfrentado la crisis sanitaria sin recurrir a endeudamiento, lo que ha sido bien recibido por las agencias calificadoras, las cuales no han bajado la nota soberana del país.
Otro punto a favor de la moneda mexicana, coinciden diversos analistas financieros, ha sido el optimismo generado por el avance en la vacuna para contrarrestar el Covid-19.
De continuar el optimismo local, y sobre todo los avances sanitarios, apuntaron analistas de CIBanco, el peso mexicano se puede seguir apreciando en lo que resta del año, al punto de poder alcanzar niveles de hasta 19.50 pesos por dólar, lo que no ocurre desde finales de febrero de este año, es decir, antes de la llegada a México del virus.