documental

El 1 de enero del 2020, mientras los habitantes de Wuhan celebraban el Año Nuevo, el doctor Liu buscaba a las tres de la madrugada un hospital donde lo atendieran por malestares respiratorios. Días antes, este médico y dueño de una clínica privada en esa ciudad china, había atendido a varios pacientes con los mismos síntomas: fiebre, tos y dolor de pecho.