Fueron asesinados a balazos José Román Rubio López y Esteban López Beltrán, ambos integrantes de Morena, y el líder pequero Jaime Osuna, en Sinaloa.
Los restos de los morenistas fueron hallados muertos en lugares diferentes, tras ser secuestrados en el municipio de Sinaloa cuando repartían despensas en comunidades serranas.