Las autoridades judiciales de Bolivia decretaron ayer prisión domiciliaria bajo custodia policial al comandante de las fuerzas armadas, el general Alfredo Cuéllar, acusado de asesinato durante la matanza de Sacaba, ocurrida en noviembre de 2019 durante las manifestaciones en apoyo al depuesto presidente Evo Morales, que dejó 11 víctimas.