Hace bastantes años, una costumbre de los papás era sintonizar el canal 4 de la tv nacional para ver ciertos géneros de películas que, entre otras cosas, los hacían olvidar que el lunes laboral estaba bastante cerca. Entre tales variedades televisivas estaban las series y películas de guerra. Cómo poder olvidar esas imágenes en blanco y negro con batallas épicas entre aviones japoneses y norteamericanos, ambientadas en la Segunda Guerra Mundial, y donde, por cierto, siempre se daba la victoria de los buenos y el sacrificio de los malos.