Cómo siempre la nulidad de los diálogos y la incapacidad para negociar beneficios para los grupos sociales precarios se evidencia en sendos ejemplos, uno de ellos Duque en Colombia que a la usanza de los criminales mete la mano a la bolsa de los contribuyentes y posteriormente ante la protesta, amenaza de muerte y mata a quienes les ha metido la mano en la bolsa. Ejemplo mismo en cuestiones de marchas amenazadas por grupos de choque y violencia que desde el ámbito virtual constituyen amenazas para los grupos precarizados dada la incapacidad de diálogo de lo que en apariencia es la autoridad.
El tema no es menor en la actual guerra entre Palestinos e Israelíes el envío de misiles de este último a la franja de Gaza explica la censura de EU en la ONU como una forma de mostrarnos el quehacer de una potencia en el sentido que Naomi Klein llamó la doctrina del Shock y que de la mano de Byung Chul Han y Michel Foucault podemos entender como la re-escritura del cuerpo, la población, la seguridad, la historia y la subjetividad, donde destruir las relaciones de fuerza y de poder de modos naturalizados como Shock, profanan como en Agamben a la nuda vida arrojada en los cientos de cadáveres que resultan de la cruzada bélica de modo que al re-escribir la narración de la historia por el estancamiento democrático en ambas naciones frente a proyectos económicos de carácter transnacional y transcontinental en distintas versiones y formatos nos habla de crisis por consolidar nuevos proyectos desde ese punto de vista para Israel y la nulidad de cooperación del lado palestino para avanzar hacia la occidentalización y con ello la participación en esos proyectos. Cómo sabrán EU protocolariza la censura de las críticas porque ellos saben algo superior según sus creencias, porque ante la pregunta de ¿a quién conviene? La respuesta es a todos. A ambos países, a usted y a mí. La doctrina del Shock que reescribe la historia por una o por otra debe gestar el cambio, mientras que las resistencias deberán ser peinadas y acomodadas en un ajedrez político donde los muertos y las bajas son del orden de los desechables y del orden de las ruinas que están tras el abandono de precisiones democráticas actuales en esos países. Donde de nuevo atentar contra los grupos precarios es justificable según el bien cosmopolita de que a todos nos favorecerá.
De otro modo todas estos episodios de white skin/black fassim donde el modo de vida imperial de las elites que atentan contra las razas “inferiores” desde su definición, sus connacionales precarizados y los pobres protestantes de medidas políticas y sus diversas formas “fachas” con las que disfrazan la impunidad de múltiples asesinatos provocados por las medidas que ellos sostienen en el sistema político de su país o en el sistema político mundial expresan como una racionalidad de negocios es la que constituye el precis donde se explica la mano invisible que toma y proyecta complicadas ecuaciones monetarias con las cuales se termina asesinando personas al más bajo costo dado que vistos para las propias matemáticas financieras son personas de bajo costo que son desechables para los proyectos de “avance” de universidades, de países después de la crisis de SARS CoV2 y de luchas por la infraestructura y negocios transnacionales.
Adam Smith no suponía que la mano invisible fuera un modo de decir necroeconomía, y desde acá muchas formas como el UE-MERCOSUR con la Amazonia explotada, deforestada y en gran desequilibrio ecológico sea una fuente de extinción y de cómo la economía arrasa y asesina a los más pobres y precarizados de Brasil. Hay proyectos nacionales como el Tren Maya o los corrredores industriales del sureste en México que deben responder a la pregunta de cuándo la mano invisible constituye una necroeconomía y junto con ello verificar si las dinámicas del TMEC no avanzan progresando sobre vías que tienen que ver con esta situación necroeconómicas y necrocénicas. Donde a final de cuenta esa ratio política que se asienta sobre un fundamento y fin económico instrumental mata.
El modo de vida imperial que se sitúa en la órbita de esta ratio fórmula un proyecto de doctrina del Shock universal donde hay que re-escribir lo que no nos gusta a través de la violencia militar, paramilitar o de grupos de contratistas privados o grupos armados que se distribuyen el mapa geopolítico del planeta creando condiciones de acumulación de riqueza por extinción y muerte bajo el régimen de la criminalidad, de la intervención extranjera ya sea en el modo de las metodologías como en Colombia o por la vía diplomática como en el caso de las censuras a las críticas del bombardeo a Palestina.
La violencia se inscribe como la pluma del nuevo relato donde la buena nueva es un mundo integral e integrado a la racionalidad de esta nueva ratio económica y que decanta a la población desecho que vive en los slums y el gentío pobre de todas las naciones. Hacer la profanación de la subjetividad entrega en el ejemplo a niños a creerse delincuentes de las mafias y asesinarse entre ellos o bien entrega a los jóvenes musulmanes a descreerse de sus culturas y mezclar ideologías terroristas como formas de lucha que si bien lo son también parte del problema en el mismo sentido de la violencia.
La pluma de la violencia escribe los cuerpos de quienes habitan en esas locaciones y son profanados y sus mentes editadas para bien del modo de vida imperial y sus lógicas. Las mujeres son ese nuevo escenario de guerra mundial porque son ellas los agentes de socialización de esas nuevas subjetivaciones y desde luego que protagonizan una especie de vida zombie porque la profanación de sus modos de vida convencionales son destruidos y derruidos por la violencia.
La doctrina del Shock explicará las peripecias históricas de la reescritura con el acento en la fórmula matemática de la economía muerte, y desde la queja de miles de cadáveres vendrá a decir que fue necesario y pero como en los Espectros de Marx de Jacques Derrida serán estos mismos muertos que en la historia reclaman en nombre de los vivos en un tiempo dislocado donde las inyucciones deberán dar cuenta de que esta evidencia de la muerte es el proyecto que respalda los cambios que verdaderamente van contra esa ideología del modo de vida imperial de la necroeconomía.
La caída de todos los regímenes que sostienen verdades en la ratio necroeconómica parten de la denuncia crítica sobre esas ganas de sostener la amenaza contra el precario en el régimen del sin diálogo y del silenciamiento de las críticas que ejerce la diplomacia, la presidencia de un país, los directivos de instituciones públicas. Nadie callará a los muertos como dice Jacques Derrida en Espectros de Marx porque los muertos ejercen la crítica histórica y son los mismos que se asientan en las oscuridades de los sentidos comunes de la memoria histórica y desde su confín como espectros tiran de los hilos de la razón cuando en crisis esta pérdida en el Out of Joint como en Hamblet: ser o no ser. Distingo único que donde la razón más allá del dinero se juega el todo por el todo contra la estupidez: el idiotismo.